Nuestros censores favoritos afirman que no es así
Incluso basta con usar un poco de sentido común: cuando las personas inhalan y exhalan constantemente con mascarillas faciales, están recirculando parte del dióxido de carbono que exhalan, en lugar de recibir oxígeno fresco del aire en sus pulmones.
El oxígeno fresco es esencial para q nuestro cuerpo funcione de manera óptima. Así, para un pensante medio, el uso PROLONGADO de mascarillas parece producir desoxigenación. Pero dejemos el sentido común y veamos si es cierto, como dice Maldita, que “no hay evidencias de que sea así”.
Año 2008. Estudio clínico de la Facultad de Ciencias de la Salud de Ankara. Recogido en el Órgano oficial de la Sociedad Española de Neurocirugía. Publicación ISSN 1130-1473, Vol. 19, Nº. 2, 2008, págs. 121-126. También publicado por la Universidad de La Rioja en Dialnet.
Como se puede ver, este estudio deja claro que hay evidencias de disminución de oxígeno en sangre tras solo 1 hora de uso de mascarillas quirúrgicas. Además, la disminución es mayor en personas mayores de 35 años. Imaginaros una persona q la usa 8 h al día. Pero esto no es todo.
Otro estudio mostró que “usar una máscara N95 durante 4 horas redujo significativamente la saturación de oxígeno y aumentó los efectos adversos respiratorios” en pacientes con problemas renales durante la pandemia de SARS.
Algunos de estos pacientes (19% de ellos) en realidad desarrollaron varios grados de hipoxemia sintomática. Por lo tanto, está comprobado que estas máscaras pueden reducir nuestro oxígeno en la sangre.
Este otro estudio aún en ensayos clínicos, realizado durante la pandemia del SARS, afirma que los trabajadores de la salud “usando máscaras N95 experimentan hipoxia e hipercapnia que reducen la eficiencia laboral y la capacidad de tomar decisiones correctas”.
Entonces, aunque todavía no es un estudio publicado, ya lo sabemos y tenemos múltiples estudios, como los anteriores, que respaldan que la hipoxia provocada por las mascarillas influye en la función cognitiva.