Una cosa es eficiencia y otra eficacia. No es que me quiera poner bizantino, pero el matiz, en este caso, es importante. El método más eficiente para generar ATP y, por lo tanto, trabajo muscular, es el ciclo de Krebs o ciclo del ácido cítrico. El problema es que es lento, demasiado lento para los que trabajamos por encima del 70% de nuestra capacidad máxima. Cuando nos ponemos burros en el gym, o en cualquier otro deporte, el ciclo de Krebs no capaz de regenerar el ATP que consumimos, con lo que sólo podemos soportar grandes esfuerzos unos escasos 4 o 5 segundos, que son las reservas de ATP de la célula muscular. Afortunadamente, contamos con el fosfato de creatina que nos permite sostener algo más el esfuerzo. Pero entre ATP y fosfato de creatina, la serie nos aguantará entre 10 o 15 segundos. Y ahora viene lo del matiz; hay un método más eficaz de generar el ATP, que es la fermentación láctica del piruvato. No es tan rápida como la desfosforilación de la creatina, pero lo es bastante más que el ciclo de Krebs. Es a través de esta vía que la serie, un poco más atrancada, podremos seguir manteniéndola entre 30 y 60 segundos, dependiendo del % de esfuerzo máximo y de lo entrenada que tengamos el cuerpo para gestionar el ácido láctico que se va acumulando y regenerar los intermedios reductores necesarios para la fermentación lo cual, a su vez, depende de la capacidad aeróbica del individuo.
¿Qué pasa con la cetosis?. Tanto la beta oxidación de los ácidos grasos, como la degradación de aminoácidos, así como los cuerpos cetónicos generados por el hígado, que no los puede consumir y acaban en el músculo y otros puntos, acaban generando acetil coenzima A directamente, sin pasar por piruvato, a diferencia de la glucólisis anaeróbica, que acaba en piruvato/ácido láctico. Como que la AcetilCoA no puede convertirse en piruvato, si las reservas de glucógeno son escasas, el músculo en cetosis sólo podrá generar ATP a través del ciclo de Krebs, que es muy eficiente, pero poco eficaz para un culturista. Es decir, que los que hacen cetosis, sólo cuentan con las reservas de ATP de la célula, más el fosfato de creatina, para sostener grandes esfuerzos. Como ha quedado dicho, entre ambas reservas, la cosa no dará para series pesadas de más de 15 segundos, siendo generosos. Bien es cierto que algo de glucógeno también tendrá el organismo en cetosis proviniente de la neoglucogénesis a partir de los intermedios del ciclo de Krebs, por lo que durante unos minutos, por la fermentación láctica, sí se podrán hacer series normales, teóricamente. Al poco rato, el rendimiento caerá en picado.
Ahora bien, para deportes en los que no se requieran esfuerzos explosivos, tipo maratón, la cetósis si puede llegar a incrementar el rendimiento ya que parece ser más rápida la conversión de cuerpo cetónico a AcetilCoA que de glucosa a AcetilCoA y sólo se consume una molécula de ATP, y no dos.
Lo que no acabo de entender es como nuestros ancestros, los anteriores a la revolución neolítica, que se supone que no conocían los cereales, se las componían para lidiar con tigres dientes de sable y mamuts agresivos. Supongo que de frutas y tubérculos sacarían la glucosa necesaria para enfrentarse a tan formidables enemigos.